jueves, 4 de noviembre de 2010

La Depresión Emocional – Dr. Armando Alducin (Predicación escrita – Parte 3 de 4)


… esto se llama, damas y caballeros, perspectiva, el día que un ser humano crea que Dios es un Aladino de la lámpara, que Él esta para satisfacer nuestros caprichos, para contestar nuestras preguntas cuando nosotros queremos, sin tener nosotros la actitud de la humildad, y reconocer, Agustín desde ese momento reconoció que él necesitaba ser humilde, porque los pensamientos de Dios son más grandes que nuestros pensamientos, y es como si Dios tuviera 1 millón de wats y mi cabeza tiene 60 wats, tu quieres realmente respuestas, si Dios te las diera fundiría tus 60 wats, porque son más grandes que tu capacidad para poder entender lo que Dios te puede explicar.

Ustedes no saben como me ha ayudado eso en mi vida, en mi vida cristiana, porque nunca dejaremos de ser asaltados por dudas, y cada vez que yo tengo dudas así graves y que pasan cosas inexplicables ¿Por qué? en ese momento recuerdo sólo una cosa; Dios dio su vida por mí en la cruz, y lo que desde mi perspectiva me parece que si Dios fuera bueno, no permitiría que se muriera la gente así, y no permitiría que esa niña de seis años fuera así, y no permitiría que yo, eso es como yo lo pienso, como yo lo deduzco, ¡pero yo no soy Dios! ¿Quién soy yo? Gusano de agua puerca, microbio, parásito, lombriz tratando yo ¡yo! Criatura finita, infinitamente más pequeño que la mente de Dios, infinitamente más tonto, el pecado ha afectado tanto nuestra mente y nuestros conceptos, y nuestras conclusiones filosóficas ilógicas, que me atrevo a decirle a Dios: ¡bájate de tu trono y siénteseme hay!, y ahora me pongo el birrete de juez y te llamo a la suprema corte, y yo te voy a juzgar, ¡haber ver contéstame! ¿Por qué hiciste esto y aquello? ¿Yo me atreveré a creer que yo puedo ser más inteligente, y yo creo poder juzgar a Dios? Soberbia, la soberbia humana. Y cuando tenemos esa actitud jamás avanzaremos. Él no encontró ninguna respuesta.

Y entonces vemos en penúltimo lugar que para que podamos nosotros vencer la depresión, tenemos que dejar de recordar el pasado y comenzar a mirar hacia el futuro. En el versículo 4 estaba el autor de este Salmo: “me acuerdo de estas cosas, y me acuerdo del pasado”, y hay matrimonios que: “te acuerdas lo que me hiciste hace 15 años” ¡que barbaridad! la señora después de 15 años todavía trae en su corazón rencor, todavía no lo ha perdonado, todavía está vivo, latente, potencialmente su coraje contra su esposo, pero es presidente de la femenil de su Iglesia, es diacona, es maestra de la Biblia, pero ahí trae todavía el veneno contra su esposo. Una de las señales más grandes de inmadurez de un cristiano, es que los cristianos inmaduros viven en el pasado, una de las señales más grandes de que has crecido en Cristo y de que has madurado, es que tu pasado está muerto, aunque vigente y potencialmente ahí está el cerebro, en la mente subconsciente, no se puede olvidar porque todo queda registrado desde que somos niños, aún que está ahí, ya no reacciono ante eso, esa es la diferencia.

Haber si me entendieron; yo no olvido ¿Verdad? lo que hicieron hace 15 años y hace 10 años, porque forma parte de la memoria, pero cuando esa persona yo me la encuentro, esa que me hizo hace 15 años, y me la encuentro ¿verdad? Y brota lo que él me hizo, yo ya estoy tan muerto a mí mismo, y estoy tan lleno de la gracia y de la misericordia de Dios ¿Por qué? porque eso que me hizo ya lo sepulte, ya no me lastima, porque ya he muerto juntamente con Jesucristo. Te imaginas a un muerto que le des una patada, y que haga (gesto) ¡eje leje, no estás muerto! ¿Verdad? pues no, como va a estar muerto, una reacción de un muerto implica que no está muerto, y cuando nosotros reaccionamos ante las injusticias de la vida demuestra en que estado vivos, si estamos muertos o estamos vivos.

Tú no puedes vivir en el pasado «es que usted no sabe hermano, yo aborte siete hijos» «es que usted no sabe hermano» ayer estuve con un banquero, estaba platicando en el primer servicio que comí con él en Santafé de México, muy, de una de las más grandes sucursales, bancos de México, cadenas de México, y cristiano, iba a nuestra Iglesia, se fue hace un año de la Iglesia, yo no lo había visto, y me habló antes de ayer «me urge que hable contigo» y ahí estaba él y su esposa, hechos pedazos, transformado, ayer me senté a platicar con él «¡Armando ayúdanos por favor!» llenos de miedo, llenos de temores, bueno lo que me contaron no podían mis oídos haberlo podido entender, ni aceptar, ni comprender yo le dije «pero ustedes eran un matrimonio cristiano, ustedes tenían las respuestas, ustedes tenían la palabra de Dios, ustedes tenían el Espíritu Santo ¿Que les pasó? ¡Por amor a Dios!» y la respuesta fue «nos soltamos de la mano de Dios, dejamos de orar juntos, dejamos de asistir a una iglesia, dejamos de tomar estudios bíblicos, dejábamos de tener amigos y matrimonios cristianos, comenzábamos» él comenzó a prosperar en el banco, y lo llevaron a prosperar, y mientras más dinero tenía, me lo confesó ayer, más robaba, y mientras más ganaba más invertía, y mientras más ganaba menos le alcanzaba, porque se había soltado de Dios, y Jesús dijo en Juan 15 «separados de mi» la soberbia nos lleva a la depresión.

Y en penúltimo lugar, en el Salmo 43 encontramos tres respuestas a la depresión. El Salmo 42 y 43 fueron escritos por la misma persona, y vemos en primer lugar en el versículo 1 y 2 la primer respuesta a nuestra depresión «júzgame oh Dios y defiende mi causa, líbrame de gente impía y del hombre engañoso e inicuo» la primera respuesta es que Dios juzgará tu causa “júzgame” significa “hazme justicia”. Muchas veces Dios se mueve con gran poder como en el Éxodo, y abre el mar rojo, y libera a todos sus hijos, y otras veces Él va a permitir que el caso que tenías en el juzgado, parece que va ganando, y tu ex marido tiene más dinero, otro su ex esposa, o los familiares, con la persona que estás peleando, o la persona que te demandó, y parecen las situaciones a veces como que el barco se hunde, y nos esta entrando agua, y está lloviendo, y ahí Dios está esperando como reaccionamos. ¿Qué vas a decir? ¿Lo vas a alabar? ¿Lo vas a seguir adorando? ¿Vas a seguir viniendo a la Iglesia? ¿Vas a seguir creyendo en Él? ¿Vas a seguir levantándote sobre las circunstancias? ¿Qué vas hacer? Primera de Pedro 1, 4 y 5 «vuestra fe, más preciosa que el oro necesita ser probada» no hay forma de saber si somos verdaderamente cristianos más que cómo reaccionamos ante las injusticias de la vida.

Muchas veces encontramos que Dios nos muestra ¿Verdad? que Él va a dejarnos, porque Él está esperando juzgarnos, por eso dice la Biblia más de 100 veces «amados míos, no se venguen, amados míos no os venguéis» Romanos 12 «Amados míos» Levítico, Deuteronomio, los Evangelios, no se venguen, no tomen en sus manos la venganza, mía es la venganza dice el Señor, yo pagare ¿Por qué? vean ustedes cómo funciona esto espiritualmente, una persona me agrede y tiene algo contra mi, me lanza saetas de fuego, me hace algo, me lastima, si yo le contesto de la misma forma, le echó más leña al fuego, el problema crece porque el diablo nos ataca, y nos pica precisamente para sacarnos de actuar en el espíritu, y provocar que nuestra carne, que mi egoísmo, que mi orgullo reaccione, y cuando yo me salgo del espíritu y comienzo a actuar, y a contestar, y a maldecir, y a decir groserías, eso es lo que él quería, en ese momento ya me abro ante sus dardos de fuego, porque he bajado el escudo de la fe, con el cual puedo apagar todo lo que el me envíe.

Cuando una persona me ataca, me dice, me calumnia, lastima mi reputación, o a ti también, en este momento si yo le pago con lo que él me hace con el bien, en ese momento Dios al ver que yo no me vengo, Dios sabe que no me vengo porque estoy viviendo por fe, estoy creyendo lo que Él me está diciendo, por eso no me vengo, me aguanto, y sufro el agravio «tengo ganas de apretarle el pescuezo ¿Verdad? tengo ganas de darle un charolazo, un sartenazo a mi esposo» pero no lo hago, me hinco y caigo delante de Dios «¡Padre juzga mi causa!» y nos postramos ante Dios y le decimos «juzga tú mi causa, hazme tú justicia» en ese momento desatamos toda oposición del enemigo en nuestra vida, y hacemos que Dios se levante de su trono y que le diga a los ángeles «esperen un momentito, y voy a bajar allá abajo en la tierra, porque allá abajo en la tierra alguien me ha tocado» «¿Como que alguien que ha tocado? tas viendo que estás rodeado?» le dijeron a Cristo «de gente y dices alguien me ha tocado, pero todo el mundo te apretuja, no pero es que la persona que me tocó lo hizo en fe»

y así estamos aquí en la Iglesia cientos de personas adorando a Dios, y Dios solamente lo toca, Dios reacciona, poder sale de Dios, así como salió de Cristo para sanar a la mujer del flujo de sangre, el poder, hacemos que surja el poder de Dios cuando lo tocamos con fe, cuando creeremos y actuamos conforme lo que Él nos dice, y entonces Dios actúa y sale su poder del cielo a la tierra, y se encarga de tus esposito, y se encarga de tu esposita, y se encarga de tu cuñado, y se encarga del jefe de tu trabajo y de cualquier persona que nos trate de lastimar, la Biblia dice «cuídense los que tocan a mis ungidos» Dios le dijo a Abraham «te bendeciré a los que te bendigan, y a los que te maldigan maldeciré» y dice Gálatas 3 y Gálatas 5 «que nosotros somos la semilla de Abraham» y esta bendición de Génesis 12 2 y 3, es mía y es tuya si eres hijo de Dios.

y dice el Salmo 37 «el impío prepara su arco para asaetear al justo, y no sabe que su flecha se volverá en su corazón» la Biblia dice que cualquier persona que me quiera hacer daño dice Dios en Isaías 41, Isaías 45 «el que conspira contra ti, conspira contra mi» y dice Dios «Yo soy tu escudo, y tu galardón» ¿Que es un escudo? es algo que está adelante de mí, que alguien que me dispare antes que me llegue a mi, le pega al escudo, dice Dios cuando nos dice «Yo soy tu escudo, los que te quieran lastimar, antes me lastiman a mi» Gloria a Dios, bendito sea su Santo nombre, entonces ¿De que temeré? ¿Cuál es mi frustración? ¿Por que estoy desanimado?

En segundo lugar dice el Salmo 43 versículo 3 «envía tu luz y tu verdad, estas guiaran, me conducirán a tu santo monte, y a tus moradas» en segundo lugar, la segunda respuesta a la depresión es la dirección de Dios en nuestra vida. Una persona que no tiene luz delante de ella sufre de temor, el temor como decía el doctor Freud, el siglo antepasado «el hombre le tiene temor a lo desconocido» tu una cueva que este oscura no entras, porque no sabe que hay, pero sí alguien tiene una lámpara, con la lámpara entras ¿Verdad? porque ya vas viendo que no hay nada, que no hay alacranes, que no hay osos etc. etc. siempre la luz nos motivará avanzar, y dice la Biblia « el que carece de luz espere en Jehová» Dios va a mostrarte lo que tu tienes que hacer, si tu esperas en Él.


Continúa…


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